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miércoles, 4 de agosto de 2010

Un potosino de cepa rememora la lucha librada hace 18 años en favor del litio para Potosí

Jaime Chumacero López
jchumacer@yahoo.com

Cuando sali de Potosí, para estudiar en la UMSA, salí con varias angustias dentro de mi ser, una de ellas se debia al desarraigo, la otra a la incertidumbre del futuro, una otra de separarme de la seguridad de mi hogar con mis padres y mis hermanos, la otra lo eterno... de dejar a la mujer amada , uno otro era el dejar a la ciudad, la misma que la recorri desde pequeño desde un extremo a otro, caminando y creando en mi mente historias miles en las que mi heroicidad hacian que dicha ciudad se encumbre entre las mejores del mundo; caminaba incluso hablando en voz alta, sin importarme que la gente me escuche, solo me interesaba mi sueño y querencia a la tierra, la misma que tal vez brotaba como acto de respuesta al eterno olvido, a la eterna explotación sin retribución alguna.

Una vez establecido en La Paz y arrebatado por esta ciudad, con sus secretos, pero tambien con su invitación a ser descubierta, con esta bulliciosa pero a la vez temerosa forma de hacer política recien recuperada a la dictadura, confieso fui tragado por una boragine de vida agitada, que no dejaba pensar en el pasado y si mas bien animarle a un futuro totalmente diferente al vivido anteriormente, la nueva ciudad para mi, se encontraba abierta a ser poseida, todo en ella era posible, los prejuicios de pueblo pequeño no existian, tan solo si eras capaz, podias trabajar de lo que sea, o desarrollar actividades disimiles sin ser reprochado por nadie, ser musico, ser teatrista, ser bohemio, ser jugador a punto de ser atrapado en el vicio, todo estaba en tus propias manos, tu lo decidias todo, confieso que mi amor inicial por Potosí se eclipsó.

En esos iniciales años de recuperación de la democracia, en Potosí se sufrio una terrible sequia, la gente debia ir caminando penosamente, por varias cuadras con baldes o latas de agua acarreadas de los vagones del tren, desde la Estación de Ferrocarriles y llevar desde ahí con destino a su casa cuidando de no derramar ni una sola gota de agua; luego vinieron los años tortuosos de las colas sin fin, con un dinerito que se volaba de tus manos y no te alcanzaba para nada, con una incertidumbre atroz, de no saber si mañana tendras la seguridad de alcanzar a comprar, con lo que tenias, lo mismo que compraste hoy; pero aún lo peor estaba a punto de llegar.

A título de Bolivia se nos muere, se encumbro la política del Neoliberalimo, se aprobo el techo polítco macroeconómico que actualmente sigue vigente, la Nueva Política Económica se instauró, hubo un intento de pararlo con una marcha de mineros, con destino a la ciudad de La Paz, la misma que fue dispersada y los mineros fueron devueltos en camiones y volquetas a sus distritos, trizte final para el único y glorioso proletariado que hizo historia desde los Barones del Estaño, hasta precisamente esa derrota histórica; luego vino la relocalización, y precisamente esta medida fue el tercer desastre de un Potosí que vivio año tras año las viscisitudes más grandes.

Si bien yo habia salido de Potosí, con fines de estudio, los que me siguieron salieron expulsados y frustrados por esos tres apocalipticos sucesos: sequia, hiperinflación y relocalización; faltaba más, la ciudad que en un 70% de sus trabajadores dependian de COMIBOL, de un zarpaso dejaba esta condición, las viviendas eran vendidas y casi regaladas, la vecindad dejo de ser tal, ya que todos sus vecinos ya no eran más, apresuraban el paso para irse de la ciudad de Potosí. Tal especie de desolación se vivio en la otrora, opulenta ciudad.

Como consecuencia de esto vino la inseguridad, la incredulidad, la tristeza, la desolación, lo que anteriormente fue sinónimo de riqueza, con su representación el Cerro Rico, dejaba de serlo, lo que se considero como eterno, ahora ya no lo era, y de sopeton!!!, les viene la noticia de la existencia de una otra inmensa riqueza, quiza más rico aún que el mismo Cerro Rico, el salar de Uyuni y con ello la existencia de una empresa Transnacional dispuesta a explotarla; los pocos potosinos que quedaron en tierra potosina, unanimente dijeron...no!!!, se opusieron totalmente, si uno preguntaba el por qué de su oposición, tan solamente escuchaban un No y No, sin porques algunos. Ahora entiendo que semejante unión ante un No tan tozudo, provenia de ese interior profundo, imposible de explicar pero que respondia a la impotencia, a la rabia contenida, de ese vivir azaroso sin futuro claro; por lo menos tenian la decisión sobre algo que no comprendian ni entendian, pero lo fresco de lo malo recien pasado les obligo a decir No!!!.

arde Potosí titula la crónica con entrevista realizada por Amalia Pando desde el escenario de los sucesos

Radio especial. Sucre se levantó por la capitalidad plena, le siguió el cabildazo de La Paz. Contradictoriamente Potosí es el departamento más rico y más pobre del país. Ahora puede levantarse Oruro. Y Chuquisaca al que le arrebataron el 6 de agosto.

Programa: EN DIRECTO

Radio: ERBOL

Conduce: Amalia Pando (periodista)

Participa: Janeth Cortez (periodista Potosí)

MOVILIZACION, MULTITUDINARIA PRESENCIA DE POTOSINOS

Comentario Cortez: “Yo he quedado prácticamente impresionada ante la convocatoria que ha tenido la misma población la jornada de ayer, mientras caminaba la marcha hacia el frente se encontraba con infinidad de personas que iban hacia el punto de concentración. La Plaza del minero ha quedado prácticamente pequeña para la presencia de gente que ha llenado el espacio. Esta convocatoria se ha dado no por la misma intención que tenía el Comité Cívico.

Creo que las declaraciones particularmente vertidas por autoridades a nivel nacional han enervado al pueblo, ese clamor que tienen los pobladores de Coroma y que pedían ayuda a gritos por medios de comunicación que este pueblo se una, yo creo que ha dado resultados. Ha sido multitudinaria la presencia de los potosinos.

Amas de casa, comerciantes, mineros que cerraron las minas, el Cerro Rico de Potosí se paralizó, llegaron de varios distritos para sumarse a esta movilización y se han dado medios comunarios de varias provincias, pese a estar bloqueadas las trancas y garitas de ingreso, marchando en la ciudad, seguían llegando de provincias para sumarse a la movilización.

Había infinidad de personas que han tomado calles alternas a la ruta dispuesta por el Comité Cívico para el desarrollo de la marcha, se ha ingresado por todo sector que se ha podido a una avenida tan grande como es la avenida Universitaria. Ese clamor de los potosinos se daba porque las amas de casa, cuando hablábamos, trabajan como palliris, barriendo calles ymanteniendo sus hogares, decían ¿hasta cuándo vamos a estar así?

Potosí no ha recibido de los gobiernos en la medida que hemos (aportado), se han comparado muchas etapas de gobierno y la atención tan pobre que ha tenido este departamento, la poca participación de los representantes ahora asambleístas han sido evaluados por los potosinos. Eso ha generado que Potosí intente impulsar el federalismo.

El gobierno no ha sabido responderle a Potosí en esta demanda, el tema de los límites data de años, años y no olvidemos se habían perdido mapas cartográficos y mucha documentación que Potosí ha presentado, lastimosamente otras instituciones estatales no le han dado celeridad a este caso. Este nuevo escenario seguramente tiene que permitir un mayor análisis de los pobladores que están en conflicto. El gobierno ha perdido el control de este conflicto. Se ha dicho que los sectores están dispuestos al dialogo, pero no se ha querido entender de principio y piden que sea en Potosí, tiene que ser en suelo y territorio potosino.

Comentario Pando: “Potosí, está en un estado de efervescencia muy parecido al que La Paz atravesó en octubre del 2003, y creo que no me equivoque. Potosí reunió tal cantidad de personas en el cabildo que realizó ayer, la pena fueron los discursos, no aportaron nada.

En la exacerbación de los ánimos, la consigna es federalismo, que no dice nada, tal vez significa que la conquista de la autonomía no le resuelve, no les ha resuelto nada y entonces buscan una escalerita más arriba intentando resolver sus problemas.

Potosí uno de los departamentos más ricos del país, Potosí cuyas riquezas han sostenido está patria durante siglos. Potosí uno de los departamentos más pobres sino el más pobre del país clama justicia para sí mismo, ahora como se expresa ese reclamo de trabajo, de desarrollo, a través de una reivindicación de las fronteras departamentales que no se van a resolver.

Cuando Sucre se levantó luego se levantó La Paz con ese cabildazo tan terrible. Después que se levante Potosí, se va levantar Oruro y este problema había que resolverlo a la media hora después de que los campesinos habían iniciado el bloqueo de caminos.

Son 9 días y hoy estamos en la cresta de la movilización, hoy no solo quieren ampliar los límites departamentales sino quieren federalismo. De acá a poquito ya no será autonomía, será independencia por una cosa lleva a otra.

El gobierno tozudamente dice: negocio, pero en Cochabamba, cuando sabe por la tradición que tienen los propios integrantes del gobierno que cuando hay un conflicto los que desarrollan ese conflicto quieren desarrollar en su propio terreno, lo hizo Evo Morales en el sin fin de bloqueo de caminos que encabezó, lo han hecho todos los sectores.

El gobierno en vez de enviar negociadores envían personas que no son las mejores para la negociación, que me disculpe Carlos Romero, pero no es precisamente el mejor negociador del gobierno. Manda a César Navarro y lo primero que dice es político, y se acabó Cesar Navarro como negociador. Tienen que ir con humildad, a desinflar el conflicto, a tratar de conceder todas las cosas que demanda Potosí.

Potosí es el centro del país, es la conexión con el Sur, las exportaciones mineras están paralizadas y además es un movimiento contagioso, puede llegar a Sucre, que le han quitado el 6 de agosto, puede llegar a Oruro que se levante en defensa de sus intereses, no es el mejor momento para el gobierno. A esa eso se suma el amauta, el borracho, el viceministro, los mormones. Creo aprovechando o no el 6 de agosto creo que soporta un cambio de gabinete que acompañe más de cerca al gobierno”.

crónica repetida en El Deber (edición digital) que ocupa lugar prominente sobre el conflicto que se vive en Potosí.

Potosí vivió ayer una jornada histórica en la que más de 100.000 personas salieron a marchar para exigir al Gobierno que solucione el problema limítrofe que los enfrenta con Oruro y atienda demandas regionales. El enojo de los vecinos de la ciudad del Cerro Rico se estrelló contra el gobernador Félix Gonzales, que intentó plegarse a la manifestación y fue corrido a pedradas y botellazos. Según fuentes extraoficiales, debió refugiarse en un cuartel para precautelar su integridad física.

La fuerza de la marcha sobrepasó a los propios organizadores, el Comité Cívico Potosinista y la Federación de Cooperativas Mineras, que no pudieron contener a la masa, que los obligó a improvisar un cabildo abierto que no pudo concluir por problemas de amplificación.
Mientras el pueblo clamaba por declarar a Potosí un Estado federal, propuesta que es apoyada por los mineros y los cívicos, algunos jóvenes tomaron como rehén al presidente cívico, Celestino Condori, y lo obligaron a marchar hasta la Gobernación para que exija la renuncia a Gonzales. “Nos hemos sacrificado verdaderamente y, la verdad, indigna que parezca que no tenemos gobernador. No hay Gobierno que pueda dar solución, es lamentable”, señaló Condori y logró eludir a sus captores.

Potosí disputa con Oruro la población de Coroma, rica en yacimientos de piedra caliza. Exige que el Gobierno defina de una vez por todas los límites. También pide que se defina la forma de explotación del Cerro Rico, para conservar su forma cónica, que se mejore la planta fundidora de plata y plomo en Karachipampa y la construcción de una cementera en su territorio, entre otras demandas.

En una conferencia de prensa, el vicepresidente Álvaro García Linera convocó al diálogo a los potosinos y orureños en Cochabamba. Si el problema limítrofe no se ha solucionado en 80 años, sostuvo, no es posible resolverlo de la noche a la mañana. Aseguró que la explotación del Cerro Rico depende de que se pongan de acuerdo entre Concipo y los cooperativistas y que el Gobierno planteó mejorar Karachipampa en 2006, pero los cooperativistas aseguraron que tenían un acuerdo con una empresa norteamericana. Sobre la planta de cemento, explicó que el Gobierno busca un crédito de $us 200 millones para implementarla, pero que no es fácil conseguir esa cantidad de organismos internacionales.

También negó que este Gobierno no atienda a Potosí y dijo que durante la administración de Evo Morales la inversión pública en dicho departamento se ha cuatriplicado, de $us 45 millones a más de $us 200 millones.
Pese al llamado, los dirigentes potosinos insistieron en que el diálogo debe realizarse en Potosí y dejaron plantados por tercera vez al ministro de Autonomías, Carlos Romero, y al gobernador de Oruro, Santos Tito.

Romero consideró que los potosinos deben abandonar la soberbia e imposturas y que deben reflexionar para el bien de la población, que pasa necesidades. Descartó la intervención policial de la manifestación, ya que entiende que las voces que piden la toma de la Gobernación son minoritarias.

Por su parte, el secretario general de la Gobernación de Oruro, Édgar Sánchez, consideró que Potosí no ganará nada castigando a su propia población y conminó a sus autoridades a sentarse a negociar una solución. “Sólo hay dos salidas: llegar a un acuerdo o irnos a un juicio contencioso y que sea la justicia la que resuelva quién tiene la razón”, dijo.

El problema también se trasladó a la Asamblea Legislativa Plurinacional, donde la brigada orureña solicitó que se militarice Coroma para que se les permita trabajar, mientras que los asambleístas potosinos Juan Carlos Cejas, David Cortes, Hugo García y Eduardo Maldonado se declararon en huelga de hambre para exigir al Ejecutivo que vaya a negociar a Potosí.
La movilización afecta a todo el sur
Cerca de 200 personas están detenidas en la Terminal de Buses de Sucre, debido a que la Patrulla Caminera de Chuquisaca ordenó cerrar la salida a Potosí debido a que los bloqueos en esa región avanzaron hasta Millares. Similar situación se vive en Tarija, con viajeros que están impedidos de viajar hacia Potosí, Chuquisaca y Oruro. En Sucre, el Pasaje a La Paz y Oruro ha duplicado su precio, ya que los buses deben desviar por Cochabamba para llegar a su destino.
Hasta ayer, las flotas que buscaban llegar a Tarija, tomaban el desvío por Chaquí (Potosí) y luego San Lucas (Chuquisaca). Sin embargo, los bloqueos avanzaron hasta Millares, a 58 kilómetros de Sucre, por lo que los efectivos frenaron el viaje de tres flotas en Yotala, desde donde tuvieron que retornar a Sucre.
Los afectados piden un puente aéreo para llegar a Tarija. Por día salen a esa ciudad unos 100 pasajeros en tres empresas de transporte. En Sucre hay diez flotas cuyo destino es la Villa Imperial, sin contar con los expresos. Por día cada empresa pierde Bs 6.800.
El comercio orureño también se ha visto afectado, porque llevan productos a Potosí, Sucre y Tarija que importan desde Chile. Sin embargo, aseguran que su mayor mercado es el eje troncal, por lo que respaldan a sus dirigentes en el conflicto con sus vecinos de Potosí y aseguran que no quieren ceder ni un milímetro de territorio.

el diario cooperativo OPINION de Cochabamba sale en defensa de Potosí y llama la atención por lo prolongado de un conflicto no atendido

Potosí es una de las regiones consideradas políticamente más proclives al gobierno del presidente Evo Morales, de acuerdo a los resultados electorales que le otorgaron durante las elecciones generales porcentajes de apoyo mayoritario y quizá los más amplios en relación a otros departamentos del país.
Este mismo departamento, sin embargo, está expresando que los intereses regionales referentes a problemas de límites, defensa de recursos naturales y otras obras de beneficio colectivo están por encima de las preferencias que pueden presentarse en épocas electorales. Éste es un dato que tiene que ser analizado con el debido cuidado por el Gobierno y por las autoridades del Ministerio de Gobierno que recurren, en circunstancias en que las protestas regionales desembocan en paros cívicos y medidas de hecho, a descalificarlos señalando, en el caso potosino, como instigador al alcalde René Joaquino, en un esfuerzo gubernamental por ligar la situación del paro indefinido con un proceso legal contra la autoridad edil.
El paro cívico que está ahogando a la población de Potosí y que dura ya seis días tiene que ver con un diferendo de límites con Oruro que se suma a un pliego de peticiones entre los que incluye la defensa del Cerro Rico, la planta de Karachipampa, el aeropuerto internacional y proyectos viales. El paro cívico tiene consecuencias muy graves para la población y para el aparato productivo al estar bloqueados los caminos carreteros.
Más allá de las afirmaciones del Ministro de Gobierno que califica el paro de Potosí como uno donde existen intereses políticos, lo que habría que analizar es un asunto que tiene connotaciones especiales, pero al mismo tiempo complejas, pues engloba un problema de límites que, generalmente, se presentan en el momento en que están en juego riquezas naturales que, a su vez, permite oportunidades de trabajo y vida para sectores poblacionales. El problema de límites entre Coroma en el departamento de Potosí y Quillaca en el de Oruro, tiene que ver con el dominio del cerro Pahua que es un yacimiento rico en piedra caliza, una de las materias principales para la producción de cemento, factorías que representan un anhelo para ambos departamentos.
El problema limítrofe cuando se presenta entre dos departamentos puede constituir uno de los más graves si es que no se adoptan o se encaminan soluciones concertadas entre las partes en litigio y, sobre todo, que tengan fundamentación en documentos y estudios.
En situaciones como las que confrontan los dos departamentos es importante la intervención oportuna del Gobierno mediante sus mecanismos técnicos pero, además, con participación de las autoridades políticas, con el propósito de encontrar caminos de solución, y no como se ha observado en este caso y en otros, cuando los problemas se agudizan hasta llegar a situaciones extremas, originando mayor sufrimiento a la población.
Esta clase de conflictos, también, tiene origen en una reacción de parte del Gobierno que, como los anteriores, sostienen su decisión de no ingresar en un diálogo bajo la justificación de que no puede hacerlo bajo presiones de medidas de hecho, aunque lo evidente es que un Gobierno, cualquier que sea, tiene la obligación de buscar el diálogo en diferentes circunstancias y antes de que los acontecimientos lleguen a niveles donde el diálogo se torne cada vez más complicado.
El conflicto que ha generado el paro indefinido en Potosí y posibles reacciones de Oruro, bajo ningún motivo puede desembocar en enfrentamientos entre pobladores o fuerzas del Gobierno, si aún existen las condiciones para dialogar.

potosinos a punto de prender fuego a la casa de Navarro funcionario masista que no consigue poner solución al conflicto

Miles de potosinos demandaron ayer a gritos, en un multitudinario cabildo, la declaratoria de Potosí como región federal frente a la negativa del Gobierno de ir a dialogar sobre sus demandas en Potosí. La movilización concluyó con la convocatoria a un nuevo cabildo para hoy y el plazo de 24 horas para que el presidente Evo Morales llegue a esa capital, caso contrario, advirtieron con hacer realidad la consigna de Potosí federal.

Mientras en Potosí se realizaba la marcha, en Cochabamba varios ministros y una comitiva de Oruro, presidida por el gobernador de ese departamento, Santos Tito, aguardó vanamente la presencia de los representantes potosinos para hablar del conflicto limítrofe.

En medio de la marcha de ayer se suscitaron varios hechos de violencia: el gobernador potosino, Félix Gonzales, que había decidido sumarse a la movilización, y el presidente del Comité Cívico, Celestino Condori, fueron agredidos físicamente.

En la noche, la casa del viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, César Navarro, sufrió un atentado dinamitero que causó daños materiales en la vivienda.

Las actividades en Potosí están paralizadas hace seis días y las carreteras de acceso a ese departamento bloqueadas hace siete días exigiendo del Gobierno la atención de un pliego de seis demandas, entre las que figura la delimitación interdepartamental.

Varios legisladores potosinos, oficialistas y de oposición, se declararon en huelga de hambre y advirtieron con no participar de los actos de celebración del 6 de agosto en Santa Cruz, mientras los legisladores orureños pidieron la militarización de las comunidades de Coroma y Quillacas, fronterizas entre Oruro y Potosí.

El Gobierno mantiene la posición de no ir a dialogar a ese departamento bajo medidas de presión y ya en cuatro oportunidades, con la de anoche en Cochabamba, ha fracasado en su intento de iniciar un diálogo en un territorio neutral.

Ayer, como parte de la radicalización de sus medidas de presión, los potosinos –mineros asalariados, cooperativistas mineros, transportistas, comerciantes, amas de casa, profesionales y universitarios entre otros– marcharon para desvirtuar las acusaciones de las autoridades gubernamentales de que el movimiento estaba digitado por el alcalde potosino, René Joaquino.

Los oradores en la marcha fustigaron duramente a los ministros de Gobierno, Sancha Llorenti, de la Presidencia, Oscar Coca, y al vicepresidente, Álvaro García Linera, por las declaraciones emitidas y la no presencia en la capital potosina.

Luego de la conclusión de los discursos, la población que permaneció en el lugar exigió a la dirigencia cívica instalar un cabildo abierto, hecho que motivó después de varios incidentes a la convocatoria a la misma para éste miércoles en horas de la tarde.

Hubo tanta gente que la plaza principal resultó pequeña y debió buscarse otro escenario para el mitin. Miles de ciudadanos de la capital y las provincias que coparon ayer las calles en muestra de la unidad regional ante la falta de atención a las demandas del pliego planteado por el Comité Cívico Potosinista (Comcipo).

La consigna de “Potosí federal” fue una constante en respuesta a la falta de atención de las autoridades nacionales pese a la huelga general indefinida que los potosinos mantienen durante cinco días.

La gente de la clase media se confundía con los obreros y campesinos en ese multicolor gusano humano que se desplazaba lentamente por calles para llegar a la avenida Antofagasta.

En la pasarela de la avenida Universitaria se instaló la tarima en la que los dirigentes se dirigieron a los miles de potosinos que poco a poco fueron llegando al lugar de concentración.

El presidente de Comcipo, Celestino Condori, resaltó el espíritu combativo de la comunidad de Coroma, que fue el detonante para que los potosinos asuman una actitud de protesta frente al avasallamiento orureño y el “nomeimportismo” de las autoridades nacionales.

Anunció que se otorgaba 24 horas de plazo para que arribe el presidente del Estado Plurinacional, Evo Morales, porque de lo contrario, la consigna de “Potosí federal” pasará a ser una realidad.

Dijo que se trata de un proceso largo pero que se tiene que comenzar a trabajar día a día en la conciencia de la gente de la ciudad y las provincias para que los beneficios de nuestros recursos naturales sean para nosotros y no para otros.

El dirigente calificó al 3 de agosto como un hecho histórico que se deberá ser considerado el punto de partida, en el que los potosinos dejaron de ser conformistas. “Los potosinos bien paridos en esta tierra querida merecemos respeto. El Gobierno nos discrimina y por ello el pueblo les dice a los ministros que son unos cobardes e incapaces y, por tanto, debieran irse a sus casas”.

Plazo a Evo

J Los cívicos dieron 24 horas de plazo al presidente Evo Morales para que vaya a la ciudad de Potosí para escuchar sus demandas.

Obispo pide a Evo diálogo

Con el propósito de superar la crisis que agobia a la comunidad potosina que desde hace siete días soporta una huelga general con bloqueo de accesos a la ciudad, la Iglesia católica demanda al gobierno de Evo Morales que propicie a la brevedad posible un diálogo que permita encontrar puntos coincidentes para llegar a una solución del conflicto.


El obispo de la Diócesis de Potosí, Ricardo Centellas Guzmán, llamó a una conferencia de prensa en la que lamentó que hasta el momento no se haya acordado un acercamiento entre el Gobierno y los dirigentes regionales del Comité Cívico.


Admitió que no es fácil hablar de paz y serenidad cuando la población potosina tiene la percepción de haber sido burlada y postergada en sus demandas sociales durante muchos años.


Sin embargo, señaló que buscar la justicia social, la integración y la igualdad de oportunidades es un derecho inalienable de todo un pueblo, por lo que toda reivindicación social y cívica por el desarrollo regional va más allá de posturas de tipo político partidarias. Instó al Gobierno a evitar confrontaciones.

Gobierno deslinda responsabilidades

Fracasa llamado a diálogo por la ausencia de Potosí

Luego de cuatro reuniones fallidas, la última en Cochabamba, fracasó el nuevo llamado al dialogo sobre el conflicto limítrofe entre Potosí y Oruro, por la ausencia de los representantes de Potosí que fueron responsabilizados de las consecuencias que puedan traer las movilizaciones en Potosí.


Pese a que a la cita fue convocada en la mañana por el ministro de la Presidencia, Oscar Coca, en un lugar que el Gobierno considera neutral, como Cochabamba, sólo asistieron los representantes de Oruro y una comitiva gubernamental, desde Potosí se hizo conocer que esperarán que el diálogo solicitado se desarrolle en esa región.


La comisión del Gobierno estuvo integrada, además de Romero, por el ministro de Minería, José Pimentel, el viceministro de Ordenamiento Territorial, Gregorio Aro, la viceministra de Producción a Grande y Pequeña Escala, Patricia Ballivián, y el gerente de la Empresa Nacional de Cemento, Oswaldo Balverde.


Aunque el gobernador de Oruro, Santos Javier Tito, dijo que las autoridades de Oruro no tienen ningún problema ni susceptibilidad para asistir a la reunión en Potosí, o en el lugar que sea necesario, el ministro Romero afirmó que no existen las condiciones ni garantías para que una comisión del Gobierno se traslade hasta la región que en este momento se encuentra movilizada y más aún luego de las agresiones que sufrió el gobernador potosino, Félix Gonzales.


El ministro de Autonomías, Carlos Romero, pidió el martes por la noche a los dirigentes cívicos de Potosí reflexionar y responder a la convocatoria para el diálogo después de dos reuniones fallidas, la última en la ciudad de Cochabamba con miras a solucionar un diferendo limítrofe.


Romero pidió “muy humildemente” a los dirigentes y a los líderes de Potosí reflexionar y abandonar su actitud de confrontación, luego de confirmar que recibieron una nota de la dirigencia de esa región rechazando la posibilidad de trasladarse hasta Cochabamba para llevar adelante un diálogo.


Romero recalcó que esta situación no se trata con un Gobierno insensible a las demandas regionales y populares, como en anteriores gestiones, "sino con un Gobierno comprometido con el pueblo".


Atacaron casa de Navarro

Un grupo de personas atacó anoche la casa del viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, César Navarro. Al promediar las 21:00, con piedras destrozaron los vidrios de las ventanas mientras que otro grupo pretendió volar la puerta del inmueble con un cachorro de dinamita.


La puerta no se destrozó, pero sí dañó el plafón de la puerta del garaje.


Al no tumbar la puerta de la casa de Navarro, los atacantes juntaron zapatos viejos y otros objetos que estaban tirados en el lugar para incendiar la puerta. Ese objetivo no se consumó, según los vecinos, por falta de gasolina. “¿Quién tiene gasolina?”, repetían una y otra vez, según la testigo presencial.


Un ciudadano que salió del interior de la casa de César Navarro dijo que no eran estudiantes universitarios sino eran pequeños con facha desastrosa.


Los efectivos antimotines evitaron consumar el propósito de los ebrios pues les hicieron escapar a los atacantes río abajo. Desde anoche, un grupo de efectivos policiales custodia la casa del Viceministro de coordinación César Navarro.

El Deber pone énfasis. Primera Plana y enviado especial para mostrar al pueblo potosino

Pablo Ortiz | portiz@eldeber.com.bo

Potosí vivió ayer una jornada histórica en la que más de 100.000 personas salieron a marchar para exigir al Gobierno que solucione el problema limítrofe que los enfrenta con Oruro y atienda demandas regionales. El enojo de los vecinos de la ciudad del Cerro Rico se estrelló contra el gobernador Félix Gonzales, que intentó plegarse a la manifestación y fue corrido a pedradas y botellazos. Según fuentes extraoficiales, debió refugiarse en un cuartel para precautelar su integridad física.


La fuerza de la marcha sobrepasó a los propios organizadores, el Comité Cívico Potosinista y la Federación de Cooperativas Mineras, que no pudieron contener a la masa, que los obligó a improvisar un cabildo abierto que no pudo concluir por problemas de amplificación.

Mientras el pueblo clamaba por declarar a Potosí un Estado federal, propuesta que es apoyada por los mineros y los cívicos, algunos jóvenes tomaron como rehén al presidente cívico, Celestino Condori, y lo obligaron a marchar hasta la Gobernación para que exija la renuncia a Gonzales. “Nos hemos sacrificado verdaderamente y, la verdad, indigna que parezca que no tenemos gobernador. No hay Gobierno que pueda dar solución, es lamentable”, señaló Condori y logró eludir a sus captores.


Potosí disputa con Oruro la población de Coroma, rica en yacimientos de piedra caliza. Exige que el Gobierno defina de una vez por todas los límites. También pide que se defina la forma de explotación del Cerro Rico, para conservar su forma cónica, que se mejore la planta fundidora de plata y plomo en Karachipampa y la construcción de una cementera en su territorio, entre otras demandas.


En una conferencia de prensa, el vicepresidente Álvaro García Linera convocó al diálogo a los potosinos y orureños en Cochabamba. Si el problema limítrofe no se ha solucionado en 80 años, sostuvo, no es posible resolverlo de la noche a la mañana. Aseguró que la explotación del Cerro Rico depende de que se pongan de acuerdo entre Concipo y los cooperativistas y que el Gobierno planteó mejorar Karachipampa en 2006, pero los cooperativistas aseguraron que tenían un acuerdo con una empresa norteamericana. Sobre la planta de cemento, explicó que el Gobierno busca un crédito de $us 200 millones para implementarla, pero que no es fácil conseguir esa cantidad de organismos internacionales.


También negó que este Gobierno no atienda a Potosí y dijo que durante la administración de Evo Morales la inversión pública en dicho departamento se ha cuatriplicado, de $us 45 millones a más de $us 200 millones.
Pese al llamado, los dirigentes potosinos insistieron en que el diálogo debe realizarse en Potosí y dejaron plantados por tercera vez al ministro de Autonomías, Carlos Romero, y al gobernador de Oruro, Santos Tito.


Romero consideró que los potosinos deben abandonar la soberbia e imposturas y que deben reflexionar para el bien de la población, que pasa necesidades. Descartó la intervención policial de la manifestación, ya que entiende que las voces que piden la toma de la Gobernación son minoritarias.


Por su parte, el secretario general de la Gobernación de Oruro, Édgar Sánchez, consideró que Potosí no ganará nada castigando a su propia población y conminó a sus autoridades a sentarse a negociar una solución. “Sólo hay dos salidas: llegar a un acuerdo o irnos a un juicio contencioso y que sea la justicia la que resuelva quién tiene la razón”, dijo.


El problema también se trasladó a la Asamblea Legislativa Plurinacional, donde la brigada orureña solicitó que se militarice Coroma para que se les permita trabajar, mientras que los asambleístas potosinos Juan Carlos Cejas, David Cortes, Hugo García y Eduardo Maldonado se declararon en huelga de hambre para exigir al Ejecutivo que vaya a negociar a Potosí.

La movilización afecta a todo el sur
Cerca de 200 personas están detenidas en la Terminal de Buses de Sucre, debido a que la Patrulla Caminera de Chuquisaca ordenó cerrar la salida a Potosí debido a que los bloqueos en esa región avanzaron hasta Millares. Similar situación se vive en Tarija, con viajeros que están impedidos de viajar hacia Potosí, Chuquisaca y Oruro. En Sucre, el Pasaje a La Paz y Oruro ha duplicado su precio, ya que los buses deben desviar por Cochabamba para llegar a su destino.
Hasta ayer, las flotas que buscaban llegar a Tarija, tomaban el desvío por Chaquí (Potosí) y luego San Lucas (Chuquisaca). Sin embargo, los bloqueos avanzaron hasta Millares, a 58 kilómetros de Sucre, por lo que los efectivos frenaron el viaje de tres flotas en Yotala, desde donde tuvieron que retornar a Sucre.
Los afectados piden un puente aéreo para llegar a Tarija. Por día salen a esa ciudad unos 100 pasajeros en tres empresas de transporte. En Sucre hay diez flotas cuyo destino es la Villa Imperial, sin contar con los expresos. Por día cada empresa pierde Bs 6.800.
El comercio orureño también se ha visto afectado, porque llevan productos a Potosí, Sucre y Tarija que importan desde Chile. Sin embargo, aseguran que su mayor mercado es el eje troncal, por lo que respaldan a sus dirigentes en el conflicto con sus vecinos de Potosí y aseguran que no quieren ceder ni un milímetro de territorio.


versión de La Prensa de La Paz...notable

toda la prensa boliviana y también alguna del exterior se ocupa de los sucesos en Potosí donde el pueblo proclamó su plena autonomía o: Potosí Federal

El conflicto se dilata y surgen brotes de violencia en Potosí

Crisis: El Gobierno lanzó anoche una nueva convocatoria al diálogo a los dirigentes cívicos de Oruro y Potosí.

Potosí / Con datos de El Potosí y agencias.- Félix Gonzales (MAS), gobernador de Potosí, fue apedreado y perseguido ayer por una turba cuando pretendía unirse a una marcha cívica, que derivó en un multitudinario e histórico mitin que, según la prensa potosina, congregó a más de 100.000 personas de la capital y las provincias al grito de “Potosí federal”. Para ponerse a salvo, la autoridad tuvo que huir por el tejado.

La jornada se saldó además con una paliza al líder cívico Celestino Condori, quien llegó a perder el conocimiento, y un ataque con piedras y dinamita a la vivienda del viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, César Navarro, quien había acusado a la dirigencia cívica de movilizar a Potosí para defender al alcalde de la capital René Joaquino (AS), cuya suspensión es promovida por el MAS.

Más de 100.000 potosinos demandaron a gritos este martes en un mitin la declaratoria de Potosí como región federal. Desde hace seis días, pobladores de ese departamento lo mantienen aislado con bloqueos y una huelga indefinida en demanda del deslinde con Oruro, la construcción de una fábrica de cemento y la reactivación de una planta de zinc, entre otras acciones.

La agudización del conflicto arrastró a cuatro legisladores potosinos, dos de ellos oficialistas, a apoyar las demandas de Comcipo con una huelga de hambre. La medida de presión fue instalada en la Asamblea Legislativa Plurinacional y los huelguistas son Eduardo Maldonado (MAS), Juan Carlos Cejas (MAS), Daniel Cortez y Hugo García.

“Una misión de ministros debe trasladarse con urgencia a Potosí para pacificar el departamento”, dijo Maldonado.

Violencia

El diario el Potosí reportó que un grupo de personas, en presunto estado de embriaguez, siguió al Gobernador potosino, que iba acompañado de dos escoltas, desde que salió de oficina, hacia las 14.00, y cuando él procuraba unirse a la “marcha de la potosinidad”.

En la calle Oruro, un grupo de personas empezó a vociferar en su contra. La rechifla aumentó a cada paso, hasta que algunos de los vociferantes trataron de golpearlo, propósito que no pudieron consumar por la acción de su seguridad. Pese a los llamados a la serenidad de los transeúntes, una lluvia piedras y otros objetos cayó sobre Gonzales, obligándolo a refugiarse en una casa que tenía la puerta abierta, donde estuvo más de una hora hasta que fue rescatado.

Para ponerse a salvo, la autoridad tuvo que pasar los techos hasta el residencial Tarija. La responsable de la Unidad de Comunicación de la Gobernación, Elizabeth Saavedra, informó que Gonzales tiene un hematoma en la cabeza causado por una pedrada.

Pero la violencia no terminó ahí. Celestino Condori, presidente del Comité Cívico Potosinista (Comcipo), fue víctima de una paliza infligida por personas que tenían aliento alcohólico y que le exigían que declarase de una vez a “Potosí federal”.

El episodio ocurrió entre las 18.30 y 19.00, cuando los ebrios cercaron la pasarela donde se efectuó el mitin, para no dejarlo escapar. Otro grupo protegió al dirigente y consiguió hacerle escapar en dirección a la avenida Tinkuy. Sin embargo, fue alcanzado cerca de la calle Cobija y tumbado en el suelo. En la caída se lastimó la nariz, sufrió una profusa hemorragia y se desmayó.

A las 21.00, un centenar de personas alcoholizadas atacó la casa del viceministro César Navarro, en la zona del Plan 40. Piedras de diferentes tamaños, arrojadas por los borrachos, hicieron añicos los vidrios de las ventanas, mientras que otro grupo pretendió volar la puerta del inmueble con un cachorro de dinamita, que sólo dañó el plafón del garaje.

Al no tumbar la puerta de la casa de Navarro, los atacantes juntaron zapatos viejos y otros objetos para incendiarla. Ese propósito no se consumó, según los vecinos, por falta de gasolina y gracias a la intervención de la Policía.

Ofertas de diálogo

Por otra parte, hubo tanta gente en el mitin que la plaza principal resultó pequeña y debió buscarse otro escenario. Los dirigentes cívicos y del comité de huelga convocaron a la marcha para demostrar al Gobierno central que la movilización no tiene carácter político.

La autoridad originaria de Coroma, Verónica Soliz Copa, fue quien graficó la posición de ese pueblo ante el problema de límites con Oruro. “Nunca me harán decir que soy de Oruro porque yo soy de Coroma, y Coroma es de Potosí”, dijo, y arrancó aplausos de la concurrencia.

Por la mañana, el vicepresidente Álvaro García Linera había advertido que “no será fácil” resolver el conflicto limítrofe entre Oruro y Potosí, que data de hace 80 años. Ambos departamentos se disputan Coroma, rica en piedra caliza, materia prima del cemento.

El Gobierno, a través del ministro de Autonomías, Carlos Romero, había propiciado una reunión en Cochabamba para resolver el tema de límites y prometió que los otros puntos del pliego regional serían negociados en Potosí, sin embargo, la propuesta fue rechazada por Comcipo, que condicionó el diálogo a su realización en la Villa Imperial.

La noche del martes, “una vez más”, el Ejecutivo extendió la invitación a dialogar. “El Gobierno del Estado Plurinacional hace conocer al pueblo boliviano y al departamento de Potosí, en especial, que en la situación que hoy vive la región reitera su predisposición al diálogo entre los departamentos de Potosí y Oruro”, dijo en un comunicado entregado a la agencia ABI poco después de las 22.00.

Oruro mantiene estado de emergencia

El Comité Interinstitucional de Defensa Territorial de Oruro informó ayer que continuará hoy, por tercer día consecutivo, el estado de emergencia en ese departamento y que los dirigentes y líderes cívicos están a la espera del inicio del diálogo con el Gobierno para tratar el límite con Potosí.

La información la dieron a conocer ayer, por separado, el jefe de la Brigada Parlamentaria de Oruro, Jaime Medrano, del MAS, y el presidente del Comité Cívico, Lino Rocha. El líder cívico insistió, además, en que Oruro iniciará el diálogo con las autoridades del Ejecutivo siempre y cuando se respeten el Estado de derecho y los límites de los municipios de Salinas de Garci Mendoza, Santuario de Quillacas y Pampa Aullagas. “Si se producen más problemas, en las próximas horas y no se llega a una solución, se convocará a la Asamblea de la Orureñidad para definir las acciones que se tomarán”, añadió ante los medios de prensa. El diputado Medrano aseguró que no está en los planes de Oruro realizar movilizaciones ni bloqueos como sí lo hizo Potosí. “Oruro quiere paz y desea que el diálogo se inicie lo más pronto posible”, dijo.

Turistas perjudicados protestan

Turistas españoles, canadienses, estadounidenses y de otras nacionalidades se perjudican por los bloqueos de carreteras que desde el sábado han instalado organizaciones políticas y sociales de la región boliviana de Potosí (suroeste), informó ayer una fuente policial.

El comandante departamental, coronel Mario Hinojosa, dijo a Efe que varios turistas extranjeros permanecen en esa ciudad a causa de las protestas. Si bien la huelga general e indefinida comenzó el sábado, dos días antes ya se registraron protestas que impidieron el tránsito en la ciudad de Potosí. “El paso está totalmente cerrado, no dejan circular ni siquiera a la policía, apenas a las ambulancias…”, señaló. Una turista española, quien no se identificó, declaró a la radio estatal Patria Nueva que junto con otros compatriotas lleva cinco días sin poder salir de Potosí para ir a Argentina, de donde debe partir a Madrid. Según el reporte policial, unos 130 vehículos están parados. EFE

Potosí está de pie. De nuevo como en otras ocasiones levanta la bandera del federalismo para defender sus intereses.

El conflicto de Potosí se complica para el Gobierno. Los bloqueos se extendieron a las provincias y ayer miles de personas marcharon y obligaron a los dirigentes a instalar un cabildo que terminó en violencia con la agresión a autoridades y a domicilios.

Entretanto, el segundo diálogo convocado por el Ejecutivo volvió a fracasar y anoche a las 22.00 se emitió un comunicado en el que se volvió a llamar a la concertación. Los cívicos mantienen su decisión de que el encuentro sea en el departamento de Potosí.

Entretanto, ayer se cumplió el sexto día de paro cívico y bloqueos carreteros que mantiene incomunicada a la Capital y a varias provincias. Los potosinos exigen la solución al problema de límites territoriales con Oruro, en la localidad de Coroma, además de otras seis demandas.

De hecho, la marcha que fue convocada por el Comité Cívico Potosinista (Comcipo) fue masiva, varios medios locales señalaron que había unas 100.000 personas.

La movilización se inició a las 14.00 y según fuentes locales, el gobernador Félix González (MAS) se sumó a la medida y quiso dirigir la marcha, pero fue agredido por una turba y tuvo que escapar con ayuda de algunos vecinos. Luego se exigió su renuncia.

Posteriormente, la marcha llegó hasta la Plaza del Minero donde se obligó a los dirigentes cívicos a instalar un cabildo. El presidente de Comcipo, Celestino Condori, tuvo que instalar la reunión, pero se cortó la luz, entonces un grupo de jóvenes, aparentemente universitarios, obligó al dirigente a ir hasta la Gobernación para tomarla; en el trayecto le golpearon al final otros líderes de Comcipo fueron a rescatarlo.

Al no cumplir su objetivo, la turba arremetió contra la casa del viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, César Navarro, quien confirmó a La Razón que los marchistas apedrearon la casa de sus suegros, de su madre y posteriormente arremetieron contra su domicilio, en el que estaba su esposa y sus hijos.

“Han puesto dinamita, han intentado entrar por la fuerza, han apedreado, han roto los vidrios de la casa, pero los vecinos se han parado y luego llegó la Policía”, relató Navarro. En la Policía departamental se confirmó los hechos de violencia, aunque no hubo ningún detenido.

En medio de esas protestas, cuatro asambleístas de Potosí —Eduardo Maldonado, Juan Carlos Cejas y Hugo García (MAS), además de David Cortez (AS)— instalaron una huelga de hambre exigiendo al Gobierno enviar un equipo ministerial al departamento de Potosí para iniciar el diálogo.

“Decidimos asumir esta extrema medida exigiendo dos puntos. Primero, la pacificación del departamento de Potosí y, segundo, que una comisión de ministros se desplace a suelo potosino para la resolución de la agenda del conflicto que en este momento se está sosteniendo”, explicó Maldonado.

Esa medida fue cuestionada por el vicepresidente Álvaro García, quien dijo que “con la huelga no se soluciona nada, la mejor forma de resolver el conflicto es sentarnos a dialogar, se levanten las medidas, viajen los ministros”.

A las medidas de protesta se sumó la Universidad Autónoma Tomás Frías (UATF) de Potosí, que decidió suspender clases hasta que las reivindicaciones potosinas sean atendidas. “Veinte mil hombres y mujeres de la comunidad universitaria están en estado de apronte y preparados para dar el pecho al enemigo ante cualquier intención de traicionar a esta bendita tierra”, dice un comunicado de la universidad pública. Las labores escolares en Potosí también están paralizadas.

Mientras tanto, los bloqueos carreteros van en aumento en las provincias y centenares de movilidades y personas están varadas en las carreteras, entre ellas turistas extranjeros.

Entretanto, Oruro pidió garantías al Gobierno para evitar que haya enfrentamientos en la zona del conflicto; incluso el diputado Jaime Medrano (MAS) pidió militarizar la zona.

Segundo llamado al diálogo fracasa

Tras el segundo fracaso del diálogo, el Gobierno volvió a convocar anoche a una tercera reunión a los representantes de Potosí y de Oruro para resolver el conflicto limítrofe entre las dos regiones.

El primer intento surgió el domingo cuando el Ejecutivo llamó a los dirigentes a una reunión en Cochabamba, pero los potosinos no asistieron. El segundo intento de diálogo fue ayer, pero tampoco llegó la representación potosina, que exige la presencia del Gobierno en la Villa Imperial.

Tras una hora de espera, el ministro de Autonomías, Carlos Romero, aseguró que pese a la ausencia de los representantes potosinos, buscarán acciones que conduzcan a un escenario de diálogo. Además descartó una intervención a los bloqueos, aunque lamentó la situación de choferes y pasajeros varados en los caminos.

Romero afirmó que no se trasladarán a negociar a Potosí, como exigen sus dirigentes, porque no existen garantías ni condiciones para dialogar. “Si lo convocan a uno y lo esperan con garrote, no hay condiciones”, acotó.

Por su lado, el gobernador de Oruro, Santos Tito (MAS), y los miembros del Comité Interinstitucional de ese departamento aseguraron que volverán a asistir a cualquier convocatoria gubernamental al diálogo.

Iván Arias
El Ejecutivo suma desaciertos

Este conflicto (limítrofe) data de hace más de 50 años y se vuelve a reactivar este tema porque de por medio está la promesa de la instalación de una fábrica de cemento en esta región.

El Gobierno está sumando desaciertos, primero el error fue prometer una fábrica de cemento en una región que de por sí era conflictiva. Segundo, haber puesto en el borrador del proyecto de Ley Marco de Autonomías, que todos los diferendos limítrofes se iban a arreglar mediante referendos; en el primer borrador estaba que inclusive iban a ser consultas departamentales; más bien producto de las negociaciones, de la presión se logró evitar que sea sólo al interior de los departamentos, pero tampoco soluciona el problema porque la amenaza de un referéndum siempre está pendiente, entonces esto ha exacerbado a los pobladores.

Si a eso le sumamos además esta actitud del Gobierno, como ocurrió con Caranavi, de decir no vamos a ir, aquí hay agentes infiltrados, la derecha (es la causa), es decir que en vez de sentarse a negociar y encontrar una solución concentrada, deja que el problema crezca y la rivalidad entre las comunidades está creciendo y es muy peligroso.

Creo que esto es una sumatoria de desaciertos, en los cuales el Gobierno debería más bien bajar los ánimos e ir a las regiones, la gente respeta mucho al Presidente y al Gobierno, y no hará nada en contra de ellos.

Iván Arias
es analista.