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sábado, 14 de agosto de 2010

luego de la firma del convenio con el Ministro Secretario Coca se dió por concluída la labor

la comisión relacionada con la construcción del Aeropuerto terminó tarea

La comisión del aeropuerto internacional para Potosí fue la primera de las seis mesas de negociaciones que llegó la noche de este sábado a un acuerdo en consenso en la ciudad de Sucre; mientras las medidas de presión en el departamento potosino aún no fueron suspendidas.

El ministro de la Presidencia, Oscar Coca, dijo que lograron llegar en esta comisión a un acuerdo y que los 15 miembros de la mesa de diálogo, entre representantes del gobierno y del departamento potosino, firmaron el acta en consenso.

“Se demostró un alto nivel de madurez y se llegó a buen término, estamos satisfechos. La conclusión del acta establece que se acuerda que se debe cumplir y se respetará la Ley 4157 de 12 de enero de 2010, que declara de prioridad la elaboración de estudios para la construcción del aeropuerto internacional en la ciudad de Potosí”, afirmó Coca.

Las seis comisiones técnicas, sobre las demandas regionales de los potosinos y sobre el conflicto limítrofe que tienen Potosí y Oruro, empezaron a deliberar pasada las 11.00 en dependencias de la Gobernación de Chuquisaca.

En la primera mesa de diálogo se trata el diferendo limítrofe entre Potosí y Oruro a la cabeza del ministro de Autonomía, Carlos Romero; en la segunda comisión, la demanda del complejo Carachipampa; en la tercera, la estructura morfológica del Cerro Rico, estos dos últimos coordinados por el ministro de Minería, José Pimentel.

En la cuarta mesa de negociación se debaten las demandas viales, a la cabeza del ministro de Educación, Roberto Aguilar; en la quinta, se debatía la construcción del aeropuerto internacional de Potosí, coordinada precisamente por el ministro Coca, quien suscribió el acuerdo con los potosinos a las 22.20.

La sexta y última mesa de diálogo, que hasta entonces aún trabajaba, negocia la instalación de una fábrica de cemento en Potosí, presidida por la viceministra de Producción, Patricia Ballivián.

Mientras, las medidas de presión en Potosí aún no fueron suspendidas de manera oficial pese al avance de las mesas de negociaciones.

durante la mañana funcionaron las mesas técnicas. al medio día se decretó cuarto intermedio. Despacho de LT

Seis comisiones técnicas de trabajo se instalaron para debatir el pliego petitorio de demandas del Comité Cívico Potosinista (COMCIPO), incluido el conflicto limítrofe que involucra al departamento orureño, para poner fin a la protesta que se ha extendido por 17 días, paralizando a grandes mineras operadas por empresas extranjeras.

La primera tiene que ver con el diferendo limítrofe; la segunda, el complejo de Karachipampa; la tercera, la preservación la estructura morfológica del Cerro Rico; la cuarta, son demandas de infraestructura vial; la quinta, el aeropuerto internacional y la sexta que tiene que ver con la instalación de la fábrica de cemento.

El ministro de la Presidencia, Óscar Coca, dijo al instalar el diálogo en Sucre que el Gobierno tenía respuestas para todas las demandas, que iban desde la reactivación de una industria metalúrgica, hasta la construcción de una fábrica de cemento y un nuevo aeropuerto.

El ministro de minera, José Pimentel declaró que "es una obligación del Estado y la humanidad conservar el cerro pero debemos garantizar las fuentes de trabajo y la uso racional del cerro".

El presidente Morales no participa del diálogo porque según confirman autoridades de gobierno, no tiene atribución directa para atender conflictos, toda vez que es una tarea que le concierne a su equipo de colaboradores.

Aún no existen cifras precisas de las pérdidas que el conflicto ha ocasionado a la minería, sin embargo, se estima que se trataría de "decenas de millones de dólares".

las comisiones están trabajando. cuando existan conclusiones de consenso es posible levantar las medidas en Potosí. hay una tensa espera. (Erbol)

Las seis comisiones técnicas, conformadas para atender las demandas de los potosinos y el problema limítrofe entre los departamentos de Oruro y Potosí, iniciaron su trabajo la mañana de este sábado en la ciudad de Sucre.

Pasada las 11.30 arrancó el trabajo de las seis mesas de negociaciones en diferentes instalaciones de la Gobernación de Chuquisaca con la participación de representantes potosinos y autoridades gubernamentales, además de orureños.

El gobernador de Potosí, Félix Gonzáles, tras el inicio de las negociaciones, abrió una mínima posibilidad que en las próximas horas se podrían levantar las medidas de presión en el departamento de Potosí, donde las organizaciones sociales llevan delante de manera indefinida un paro desde hace 17 días, con bloqueo de caminos y piquetes de huelga de hambre.

“Tras el cuarto intermedio, las seis mesas de trabajo ya están funcionando, ahora tenemos que ponernos plazos en las comisiones para los resultados, esperemos que hoy mismo emitamos conclusiones favorables, lo que podría incidir que se vayan levantando las medidas de presión, ojalá así sea”, declaró.

Por su parte, el ministro de Autonomía, Carlos Romero, en conferencia de prensa, pidió a los movilizados suspender sus medidas para que todo vuelva a la normalidad en el departamento de Potosí.

“Estando en pleno desarrollo el proceso de diálogo, nosotros exhortamos a los sectores movilizados abrir los caminos, dejar transitar a la gente que está bloqueada desde hace mucho tiempo, les pedimos ir levantando sus medidas de presión, los piquetes de huelga de hambre”, afirmó Romero.

cuatro periodistas heridos, uno internado. dos funcionarios potosinos son rehenes. se desató la violencia en los incidentes de la caravana. (G.Líder)

Campesinos armados con palos agredieron ayer a cuatro periodistas y tomaron a dos funcionarios de la Gobernación potosina como rehenes en la comunidad Pampasoico, a 15 kilómetros de la tranca de Betanzos. Horas antes, en el Palacio Quemado, dirigentes de los ayllus del norte, sudeste y centro potosino se reunieron con el presidente Evo Morales para expresarle su apoyo y ofrecerse a cercar Potosí para que la situación regional se normalice.

El secretario general de la Federación Sindical Única de Trabajadores Originarios de Ayllus Norte de Potosí (FSUTOANP), Juvenal Pacheco, informó que se reunió con Evo Morales para expresarle su apoyo y anunciarle que están dispuestos a garantizar su seguridad y la de los cívicos si negocian en Macha.

Las víctimas formaban parte de la comitiva de delegados potosinos que retornaba a la Villa Imperial, después de considerar que había fracasado el diálogo en Sucre con autoridades del Gobierno y delegados del departamento de Oruro.

Horas antes, el ministro de la Presidencia, Óscar Coca, advirtió que los campesinos normalizarían la situación.

La autoridad sostuvo: “Este fin de semana, estamos seguros de que los pobladores rurales, ya por su cansancio ante esta intolerancia, puesto que fueron objeto de abusos, van a normalizar las actividades. Entonces este hecho se va a resolver desde las comunidades rurales. Lo van a normalizar, nos lo hicieron conocer”.

En forma simultánea, en La Paz, el secretario ejecutivo de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB), Roberto Coraite, informó que el organismo daba un plazo de 24 horas al Gobierno y a los potosinos movilizados para entablar el diálogo o de lo contrario se reservaba el derecho de intervenir.

El líder agrario se abstuvo de dar a conocer, por estrategia, cuáles serían las medidas anunciadas.

Los agredidos en la ruta Sucre-Potosí fueron Edwin Eguino, Boris Ruiz Castro, Johnny Castro y Benigno Castillo, quien presenta policontusiones y está internado en el Hospital Santa Bárbara de Sucre. Ellos iban al frente de la caravana.

Superaron dos puntos de bloqueo, pero los campesinos de la mencionada comunidad los obligaron a retornar. Al dar media vuelta y encontrar al resto de la comitiva, evaluaron los riesgos y decidieron aceptar el diálogo.

Un contingente de mineros cooperativistas se mostró dispuesto a abrirse paso a dinamitazos. Los periodistas los convencieron de evitar un inútil derramamiento de sangre.

Los dos rehenes son Raúl Vacaflores y Raúl Portillo, miembros de la Unidad Técnica de Límites de la Gobernación de Potosí. Para liberarlos, los comunarios demandaron la presencia de Félix Gonzales, principal autoridad política del departamento, aunque éste permaneció anoche en Sucre para participar en las sesiones preparatorias del diálogo, pero hizo algunas gestiones telefónicas para que sus compañeros de trabajo no sufrieran agresiones ni maltratos en esa comunidad.

De esa forma se cumplían la advertencia que el ministro de la Presidencia, Óscar Coca, había formulado a primera hora y lanzado Roberto Coraite.

Cuando anunció ayer que el Gobierno no usaría la fuerza para restablecer el orden en el departamento de Potosí, Coca dijo que las comunidades campesinas de la región están dispuestas a intervenir.

“Este fin de semana, estamos seguros de que los pobladores rurales, ya por su cansancio ante la intolerancia, puesto que fueron objeto de abusos, van a normalizar las actividades. Entonces este hecho se va a resolver desde las comunidades rurales”.

Cerca del mediodía de ayer, y por demanda de los cívicos potosinos, los ministros de Economía, Luis Arce, y de Educación, Roberto Aguilar, así como la viceministra de Producción Industrial, Patricia Ballivián, llegaron a Sucre para participar en las mesas de diálogo, junto con José Pimentel (Minería), Carlos Romero (Autonomías) y el mencionado Óscar Coca.

El retorno de la comitiva potosina fue recibido como un triunfo del Gobierno. El ministro Romero agradeció públicamente al pueblo potosino por reconducir el diálogo y conminó a la dirigencia a “dejar de lado la conspiración política” y buscar soluciones a los problemas.

El presidente del Comité Cívico Potosinista (Comcipo), Celestino Condori, se limitó a confirmar que había retornado a causa de la presión ejercida por los campesinos y se mostró dispuesto a conversar.

Con ese antecedente, el Gobierno y los delegados regionales y cívicos de Potosí establecieron anoche las bases para negociar el pliego petitorio que contiene seis puntos. Después de unas cuatro horas de intercambiar ideas se establecieron las reglas para llevar adelante el proceso.

Cada punto de la agenda regional será analizado en una mesa de trabajo. Las conclusiones serán puestas a consideración de una plenaria, aunque previamente, deberán ser discutidas por el Consejo Consultivo de Potosí.

Al cierre de esta edición, las partes en conflicto designaban representantes para cada grupo de estudio.

A pesar de la instalación formal del diálogo, la población potosina permanece movilizada en la Villa Imperial. No hay ingreso o salida de vehículos, los víveres escasean y la situación se mantiene tensa.

Hasta el mediodía de ayer, los más de 200 piquetes de ayuno voluntario, que se abrieron el viernes 6 de agosto, reunían en esa capital departamental a más de 2.000 personas, mientras que 106 habían sido dadas de baja a causa de su deterioro físico.

Al iniciar la conversación, el ministro Coca mostró las cartas del Ejecutivo en las negociaciones.

Sobre el diferendo limítrofe, se descarta un referéndum porque la consulta es sólo aplicable para municipios de un mismo departamento, aseguró que las macrorregiones definidas en la Ley de Autonomías no implican la creación de una jurisdicción político-administrativa y que tampoco es posible que los ayllus de Oruro y Potosí creen una autonomía indígena porque ésta sólo puede existir dentro de los límites de un mismo departamento.

Coca anunció también la inversión de 6,18 millones de bolivianos en estudios técnicos que han identificado al yacimiento Quiburi, en Uyuni, como apto para instalar la factoría, pues posee seis veces más piedra caliza que el cerro Pahua.

Los rumores circulan sin control

Las autoridades del Ejecutivo y el gobernador de Oruro, Santos Tito Véliz, negaron ayer las versiones que daban cuenta de que campesinos orureños tomaron por la fuerza el cerro Pahua, ubicado en el límite con Potosí y que es objeto de disputa por tratarse de un yacimiento de caliza, materia prima del cemento.

Según El Potosí, desde el jueves, los medios de la Villa Imperial reciben frecuentes avisos de hechos graves, que en ningún caso resultan ser verdaderos.

El jueves 12 se dijo que se disparaba gas lacrimógeno contra los bloqueadores apostados en la garita San Antonio, que permite el ingreso y la salida de motorizados a Oruro y La Paz, con el fin de lograr el paso de los vehículos varados.

Ayer, otros rumores señalaban que campesinos afines al Movimiento Al Socialismo (MAS) lograron desbloquear la garita San Antonio, lo que también resultó falso.

A través de radio Kollasuyo, el ministro de Gobierno, Sacha Llorenti, se refirió a esas acciones como una política de desestabilización tendente a crear un clima se violencia para lograr beneficios de grupo.

la caravana fue interceptada en Millares y obligada a regresar a Sucre. periodistas evitaron choque con riesgo de sus vidas. tenso anochecer. L.T. Cb.

Representantes potosinos y del Gobierno, después de una jornada tensa y de temores de un nuevo fracaso, anoche instalaron el esperado diálogo en Sucre, aunque las medidas de presión iniciadas hace 15 días por Potosí, el bloqueo de caminos, el paro indefinido y la huelga de hambre se mantienen. Hasta el cierre de la presente edición se conformaron las mesas de negociación para tratar los seis puntos del pliego petitorio potosino.

Pese a la insistencia de los ministros en sentido de que se levanten las medidas de presión para no seguir “castigando a la población”, la petición se dejó para ser considerada después, una vez que avancen las negociaciones.

Tras una serie de argumentaciones sobre la cantidad de mesas de negociación y la limitación de participantes, expuestas en tonos menos encendidos que la jornada anterior, se acordó formar las comisiones y para eso a las 23:30 se declaró un intermedio hasta hoy a las 8:00.

Cuando se daba por fracasado el diálogo, un centenar de campesinos armados con palos cambió el curso del conflicto. Ayer, a las 17:10, cuando parte de la comisión negociadora que se desplazó el jueves a Sucre trataba de regresar a Potosí, un grupo de campesinos apostados en Pampasoico, a 15 kilómetros de la tranca de Millares, no dio paso a la comitiva y cuando los periodistas se bajaron a informar sobre el estado de las negociaciones, fueron corridos a palos y se salvaron por poco de ser linchados.

Los campesinos, luego de apalear al dirigente de la prensa potosina, Benigno Castillo, se ensañaron con los vehículos, obligándolos a retornar a Sucre con un mensaje: negocien con los ministros en Sucre. La orden de los campesinos se cumplió anoche, después de las 23:00, cuando la delegación de ministros aceptó establecer seis comisiones para tratar las demandas potosinas.

Los comunicadores regresaron hasta El Abra de San Miguel, donde se encontraron con otra parte de la comitiva que avanzaba hasta Potosí. Allí, un grupo de mineros estaba decidido a esperar al resto para despejar el camino, pero un grupo de comunicadores los disuadió de que no era necesario que corra sangre potosina y lo mejor era llamar a la dirigencia, que estaba en Yotala, a la salida de Sucre, y convencerlos de que inicien el diálogo.

Esto fue tomado como un logro por el Gobierno que, a través del ministro de Autonomías, Carlos Romero, agradeció al pueblo potosino por reconducir el diálogo y conminó a la dirigencia a “dejar de lado la conspiración política” y sentarse en la mesa a dialogar. Cuando ya se había decidido conformar las comisiones, Romero les recordó que esto se pudo haber hecho el 1 de agosto sin tanto sufrimiento para el pueblo potosino.

A partir de ese momento, los ministros se comportaron como vencedores del conflicto y condujeron las negociaciones. Lo único que no consiguieron fue que Potosí suspenda sus movilizaciones y que Oruro retire la amenaza de iniciar medidas de presión desde el lunes.

Al final de la tarde de ayer, las noticias que llegaban a Sucre desde Potosí no eran buenas. Por un lado, unas fuentes aseguraban que toda la población estaba en la plaza esperando a la comisión para pedir explicaciones sobre por qué no regresaron ante la ausencia del presidente Evo Morales.

Los dirigentes desplazados a Sucre se encontraban entre la espada y la pared y decidieron ingresar a dialogar, pero consiguieron que a Romero, Coca y al ministro de Minería, José Antonio Pimentel, se sumen los titulares de las carteras de Economía, Luis Arce Catacora, y de Educación, Roberto Aguilar, además de la viceministra de Producción, Amparo Ballivián. Para conseguirlo, cedieron a la exigencia de que el presidente, Morales, inaugure el diálogo.

Campesinos se reúnen con Evo

Los campesinos del norte de Potosí anuncian cerco a la capital potosina si es que los dirigentes cívicos no llegan a acuerdos con los ministros en Sucre. La advertencia fue dada a conocer por el secretario general de la Federación Sindical Única de Trabajadores Originarios Ayllus del Norte Potosí, Juvenal Pacheco, tras una reunión en Palacio de Gobierno con el presidente Evo Morales.


Pacheco detalló que esa organización se reunió con Evo Morales para expresarle su apoyo y anunciarle que están dispuestos a garantizar su seguridad y la de los dirigentes cívicos si negocian en Macha.


La propuesta de llevar a Evo y los cívicos a la “tierra del tinku” es considerada una salida a la crisis que enfrenta Potosí que no halla solución pese a la huelga de 15 días.

LAS SEIS DEMANDAS POTOSINAS

En relación a las seis demandas potosinas, el ministro de la Presidencia, Oscar Coca, expuso los argumentos del Gobierno.


Sobre el diferendo limítrofe entre Potosí y Oruro, descartó un referéndum porque la consulta es sólo aplicable para municipios de un mismo departamento, aseguró que las macrorregiones definidas en la Ley Marco de Autonomías no implican la creación de una jurisdicción política administrativa y que tampoco es posible que los ayllus de Oruro y Potosí creen una autonomía indígena en la zona de conflicto porque ésta sólo puede existir dentro de los límites departamentales.


Sobre la construcción de la vía Bellavista-Vitachi-Cotagaita, Coca aseguró que el Gobierno ha pagado el 100 por ciento de la obra a la empresa brasileña OAS y que la reanudación de las obras es inminente.


Sobre Karachipampa, explicó que en 2007 la fundición fue concedida a la empresa Atlas Preciuos Metals, que se comprometió a invertir $us 85 millones, pero sólo desembolsó $us 2,3 millones hasta la fecha, cuando ya debía haber invertido $us 79 millones.

El Gobierno hizo efectiva la póliza de seguro por $us 800.000 y hay un arbitraje con la empresa para definir el futuro de la fundidora.


Sobre la instalación de dos fábricas de cemento, una en Oruro y otra en Potosí, Coca aseguró que se ha invertido Bs 6,18 millones en los estudios técnicos que han identificado al yacimiento Quiburi, en el municipio de Uyuni, como apto para instalación de la factoría, puesto que posee seis veces más piedra caliza que el cerro Pagua, en actualmente en litigio entre ambos departamentos.


Sobre la preservación de la forma cónica del Cerro Rico de Potosí, el Ejecutivo ha contratado a una empresa para realizar un estudio técnico que en la actualidad tiene un avance del 91 por ciento. Por ello, el Gobierno considera que ha cumplido con todas las demandas potosinas. Sin embargo, los dirigentes potosinos aseguran que en papel se cumple la agenda, pero no en los hechos.